Hubo escenas penosas en la televisión, la semana pasada. Y prometen seguir,
mientras no se sepa quién mató a Lola Chomnalez y por qué. La noticia reúne
todos los condimentos que permiten alimentar el morbo colectivo y allá fuimos a
darles a los espectadores `lo que querían ver`: el lugar de los hechos, corridas,
testimonios, periodistas de policiales convertidos en detectives, nuevas
hipótesis. Nada que ya no se sepa.
La imagen angelical de una adolescente de familia acomodada, de vacaciones en
Uruguay, yendo a leer a la playa. Funde a negro, música incidental, imágenes en
diapositiva, el cuerpo semienterrado en la arena, el padrino sospechado. Suficiente
material para desplegar el circo mediático. Proliferan invitados,
“especialistas”, cualquiera que haya visto u oído algo vale, vecinos, conocidos
de la madrina, o de la abuela famosa, el mecánico, el portero de la otra
cuadra. No importa el dolor de esa familia, estamos en vivo y somos
periodistas, queremos periodistar.
Entre la autocrítica y la vergüenza ajena puedo decir que existen atajos de
prudencia, moderados intentos para evitar el mal gusto y no sumar brillos al
show. Es un desafío cuando te sientan como entrevistado a un perito que no trabajó
en el caso y te piden que estires porque el rating va en ascenso. Pero en ese
instante al aire, vos decidís cuando se acabaron las preguntas. ¿Qué si eso
alcanza? Es algo.
Probablemente demasiado poco cuando te tapa el tsunami de 24 horas
ininterrumpidas en rojo urgente. Y tu único recurso es el ejercicio semántico
de restar adjetivos. Tiendo a creer que quienes trabajamos en medios masivos de comunicación tenemos
la responsabilidad y el desafío de librar la lucha desde adentro. Con suerte de
vez en cuando lograremos meter una nota propia en la agenda y eso, para el
gueto que todavía suponen los temas de género, es mucho decir.
Valeria Sampedro.
Este texto fue escrito para una nota colaborativa para el portal Marcha
(http://www.marcha.org.ar/index.php/generos/6307-entre-el-dolor-la-cobertura-del-asesinato-de-lola-un-analisis-necesario-i)
muy bien expresado y sentido
ResponderEliminarfelicitaciones por tu prudencia y la lucha
Recordé este texto y volvi x él. Ya en mayo no solo no hay culpables sino que los acusados descartados parecen volver a serlo. La batalla por evitar adjetivos poco calificativos en notas de tele cuenta con mi humilde apoyo. No resignes nada!!.
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